Proverbios 16 Reina-Valera 1960
Proverbios sobre la vida y la conducta
1 Del hombre son las disposiciones del corazón; Mas de Jehová es la respuesta de la lengua.
2 Todos los caminos del hombre son limpios en su propia opinión; Pero Jehová pesa los espíritus.
3 Encomienda a Jehová tus obras, Y tus pensamientos serán afirmados.
4 Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, Y aun al impío para el día malo.
5 Abominación es a Jehová todo altivo de corazón; Ciertamente no quedará impune.
6 Con misericordia y verdad se corrige el pecado, Y con el temor de Jehová los hombres se apartan del mal.
7 Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová, Aun a sus enemigos hace estar en paz con él.
8 Mejor es lo poco con justicia Que la muchedumbre de frutos sin derecho.
9 El corazón del hombre piensa su camino; Mas Jehová endereza sus pasos.
10 Oráculo hay en los labios del rey; En juicio no prevaricará su boca.
11 Peso y balanzas justas son de Jehová; Obra suya son todas las pesas de la bolsa.
12 Abominación es a los reyes hacer impiedad, Porque con justicia será afirmado el trono.
13 Los labios justos son el contentamiento de los reyes, Y éstos aman al que habla lo recto.
14 La ira del rey es mensajero de muerte; Mas el hombre sabio la evitará.
15 En la alegría del rostro del rey está la vida, Y su benevolencia es como nube de lluvia tardía.
16 Mejor es adquirir sabiduría que oro preciado; Y adquirir inteligencia vale más que la plata.
17 El camino de los rectos se aparta del mal; Su vida guarda el que guarda su camino.
18 Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la altivez de espíritu.
19 Mejor es humillar el espíritu con los humildes Que repartir despojos con los soberbios.
20 El entendido en la palabra hallará el bien, Y el que confía en Jehová es bienaventurado.
21 El sabio de corazón es llamado prudente, Y la dulzura de labios aumenta el saber.
22 Manantial de vida es el entendimiento al que lo posee; Mas la erudición de los necios es necedad.
23 El corazón del sabio hace prudente su boca, Y añade gracia a sus labios.
24 Panal de miel son los dichos suaves; Suavidad al alma y medicina para los huesos.
25 Hay camino que parece derecho al hombre, Pero su fin es camino de muerte.(A)
26 El alma del que trabaja, trabaja para sí, Porque su boca le estimula.
27 El hombre perverso cava en busca del mal, Y en sus labios hay como llama de fuego.
28 El hombre perverso levanta contienda, Y el chismoso aparta a los mejores amigos.
29 El hombre malo lisonjea a su prójimo, Y le hace andar por camino no bueno.
30 Cierra sus ojos para pensar perversidades; Mueve sus labios, efectúa el mal.
31 Corona de honra es la vejez Que se halla en el camino de justicia.
32 Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; Y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.
33 La suerte se echa en el regazo; Mas de Jehová es la decisión de ella.
Dios Padre, quédate conmigo hoy. De hoy en adelante, rodéame de sabiduría y dame el espíritu de hacer todo para Tu gloria. Te encomiendo mis obras, Señor, y te pido que establezcas mis pensamientos para que no vacile.
Gracias por las muchas verdades que se esconden en las preciosas páginas de Tu Palabra. Oro para que los planes y propósitos de mi corazón reflejen el deseo de Tu voluntad para mí vida.
Gracias porque mi vida está en Tus manos, y oro para que la respuesta de mi lengua y mis estén perfectamente alineados con Tu Palabra y Tu voluntad.
Padre, hoy te encomiendo todas mis obras y actividades. Por favor, trabaja a través de mí, para que Tu plan para mi vida alcance su plena realización.
Amado Señor y Padre, gracias, porque tengo la libertad de hacer planes futuros y, sin embargo, tengo la maravillosa seguridad de que Tú eres quien dirige mis pasos.
Gracias, porque se me ha dado el libre albedrío para tomar decisiones en la vida y una mente sana para pensar y considerar diferentes opciones.
Oro para que me des la sabiduría para tomar las decisiones correctas en la vida, pero te agradezco, Padre, que no estoy solo, porque me guías por el mejor camino y diriges mis pasos en el camino que debo seguir.
Dame sabiduría y discernimiento para tomar las mejores decisiones en la vida y un oído abierto a Tu dirección y guía.
Padre Celestial, gracias por las claras advertencias sobre el orgullo y la arrogancia y las terribles consecuencias que se producen cuando se nutre un espíritu altivo.
Guárdame, oro, del pecado del orgullo o de la confianza en mi propia importancia ... o de pensar que puedo sumar a mi salvación o contribuir a mi santificación a través de mis propias obras.
Ayúdame a crecer en la gracia y a caminar en espíritu y en verdad. Oro para poder abrazar cada etapa de la vida como una oportunidad para madurar en la fe y acercarme a Ti, sabiendo que la vejez y las canas son una corona de gloria, cuando se encuentra en aquellos que son declarados justos, fe. Gracias en el nombre de Jesús, AMEN.
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