67 Dios tenga misericordia de nosotros, y nos bendiga;
    Haga resplandecer su rostro sobre nosotros; Selah

² Para que sea conocido en la tierra tu camino,
En todas las naciones tu salvación.

³ Te alaben los pueblos, oh Dios;
Todos los pueblos te alaben.

⁴ Alégrense y gócense las naciones,
Porque juzgarás los pueblos con equidad,
Y pastorearás las naciones en la tierra. Selah

⁵ Te alaben los pueblos, oh Dios;
Todos los pueblos te alaben.

⁶ La tierra dará su fruto;
Nos bendecirá Dios, el Dios nuestro.

⁷ Bendíganos Dios,
Y témanlo todos los términos de la tierra.

(Un Salmo que explora cómo podemos buscar las bendiciones en nuestras vidas, tanto para ser salvos de nuestros pecados como para recibir de Dios todo tipo de cosas buenas para que vivamos esta vida al servicio de él y del mundo en el que vivimos. )

Padre celestial, te damos gracias porque nos has bendecido con tu gracia, que se ve en la entrega de tu Hijo en la cruz, que nos ha ganado nuestro perdón y nos ha devuelto a una relación cercana contigo. Ayúdanos a través de las muchas bendiciones que nos has dado para llevar el mensaje de tu amor a este mundo herido para que todo el mundo pueda alabarte como te mereces.

“Señor, en lugar de que yo magnifique los problemas de mi vida, ayúdame a magnificarte a Ti. Ayúdame a alabarte siempre y sin cesar por tu gracia inmerecida, misericordia y sabiduría en mi vida. Y en todos mis caminos, Señor, ayúdame a reconocerte. Eres tú y solo tú Quien enderezarás mis caminos. Amén.