¹¹³ Aborrezco a los hombres hipócritas;
    Mas amo tu ley.

¹¹⁴ Mi escondedero y mi escudo eres tú;
En tu palabra he esperado.

¹¹⁵ Apartaos de mí, malignos,
Pues yo guardaré los mandamientos de mi Dios.

¹¹⁶ Susténtame conforme a tu palabra, y viviré;
Y no quede yo avergonzado de mi esperanza.

¹¹⁷ Sosténme, y seré salvo,
Y me regocijaré siempre en tus estatutos.

¹¹⁸ Hollaste a todos los que se desvían de tus estatutos,
Porque su astucia es falsedad.

¹¹⁹ Como escorias hiciste consumir a todos los impíos de la tierra;
Por tanto, yo he amado tus testimonios.

¹²⁰ Mi carne se ha estremecido por temor de ti,
Y de tus juicios tengo miedo.

 La letra SAMECH es un símbolo de apoyo y protección. Esto se infiere por su forma que lo abarca todo y se afirma por su significado: "soporte". Dios quiere protegernos escondiéndonos bajo su sombra (Sal. 91: 1) Él quiere defendernos, él es nuestro escudo y quiere sostenernos y todo por su palabra que es su guía para nosotros. ¡Salir de los límites de su palabra es estar expuesto al enemigo!

 Ciertamente, una persona piadosa no es un lisiado emocional. Experimenta una variedad de emociones por una variedad de razones. De hecho, una persona piadosa a menudo tiene mucho más control sobre sus emociones en el sentido de que se esfuerza por expresar esas emociones dentro de un contexto bíblico.

  En otras palabras, mientras que la carne quiere amar al mundo, la persona piadosa quiere amar a Dios y estar separada del mundo. Cada emoción es dada por Dios y puede enfocarse de manera correcta o incorrecta.

  El salmista nos muestra un gran contraste de emociones en esta sección. Pasa del amor al odio, de la esperanza al miedo. Pero sus emociones no se desvian. Cada emoción se encuentra en un entorno adecuado.

Señor, ayúdanos a no tomar esta advertencia a la ligera. Ayúdanos a ser fieles en el cumplimiento diario de tu palabra. Ayúdanos a amar tu ley, espera tu palabra en tiempos de necesidad, observa tus mandamientos para que podamos vivir. Tu palabra nos mantiene a salvo. Amén