¹²⁹ Maravillosos son tus testimonios;
    Por tanto, los ha guardado mi alma.

¹³⁰ La exposición de tus palabras alumbra;
Hace entender a los simples.

¹³¹ Mi boca abrí y suspiré,
Porque deseaba tus mandamientos.

¹³² Mírame, y ten misericordia de mí,
Como acostumbras con los que aman tu nombre.

¹³³ Ordena mis pasos con tu palabra,
Y ninguna iniquidad se enseñoree de mí.

¹³⁴ Líbrame de la violencia de los hombres,
Y guardaré tus mandamientos.

¹³⁵ Haz que tu rostro resplandezca sobre tu siervo,
Y enséñame tus estatutos.

¹³⁶ Ríos de agua descendieron de mis ojos,
Porque no guardaban tu ley.

El Salmo 119 Pe es una oración poderosa, que viene del alma angustiada de David. Donde expresa su amor por la Palabra, ora por fidelidad en guardarla, ora por protección, le pide a Dios que le enseñe mas de Su Palabra y recalca la importancia de guardar la ley. 

Guardar la Ley de Dios no es una acción que DEBEMOS hacer por imposición; en cambio, Es una acción que nace del corazón como resultado no solo de la obediencia sino del amor que reflejamos al Padre. Nuestra obediencia debe provenir de lo más profundo de nuestro ser. 

Oremos:

Señor Mi alma está sorprendida por tu verdad. Tu palabra es abrumadora; inunda mi mente con luz, disipando la oscuridad y la locura de este mundo. Tus mandamientos apagan mi sed del mundo como si me transportara a una dimensión diferente,  Guárdame del desastre manteniendo cada paso que doy fiel a tu promesa. Dame paciencia con el largo camino de la obediencia, mientras que otros parecen prosperar en la iniquidad. Dame ojos para ver de largo y una espalda para mantenerme firme, animame y fortaleceme hoy Señor. En el nombre de Jesùs, amen.

Queridos sinceramente este Salmo me avergüenza. Mis ojos derraman lágrimas, porque a menudo me pierdo entre la cotidianidad de la vida apagando la ilusión de verle un dīa en el cielo. Olvidandome de aquellos que Cristo vino a salvar.

¿Qué podemos hacer para lograr un corazón de empatía por los aquellos que nos rodean?


Ore hoy para que sus ojos derramen lágrimas por todos los que lo rodean y que no guardan la Ley de Dios. Ore también para que le ayude a leer la Biblia regularmente como se recomienda en esta sección del Salmo 119.

Que Dios te bendiga!

Con amor en Cristo tu Consejero Espiritual